Dragon Ball Super es uno de los mayores animes del momento, pese a sus críticas y haters. Si biene tiene muchos errores, y también aciertos, hay algo que si la distingue mucho de lo que fue Dragon Ball Z.
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Dragon Ball Super fue anunciado en 2015, y ha tenido bastante éxito desde entonces (fijense en los ratings y ventas). Cuando se tiene algo tan famoso como Dragon Ball Z, es difícil hacer una secuela que sea tan buen.
Pero, Dragon Ball Super no decepcionó, ya pesar de que no era tan popular como Dragon Ball Z, todavía es muy buena. También hubo altos y bajos en Dragon Ball Super. Los fans criticaron el comienzo del anime, que adaptó la Batalla de los Dioses y el Retorno de Freezer. El equipo de animación también fue altamente criticado en 2016, pero su calidad ha aumentado mucho desde entonces.
Ahora, una vez dicho esto, pasemos a lo que esta serie se distingue de “Z” y es una de las cosas que más aborrecen los fans y es la ausencia de sangre. A pesar de que la franquicia Dragon Ball no estaba repleta de gore y mutilaciones, todavía había muchos momentos sangrientos durante las luchas épicas. Cada lucha de Dragon Ball Z tenía momentos donde los luchadores quedaban altamente heridos, y cubiertos en sangre. Llegamos a ver momentos como éste cuando éramos niños:
Dragon Ball Super tiene problemas con la censura, y por eso no vemos más sangre en el anime. No es un problema enorme, pero aún así es cuestionado por los fans. El hecho es que Dragon Ball Super no tiene el permiso de animar escenas que contengan sangre. El motivo de esto es porque Dragon Ball Super se hace para un público más joven, por lo que el uso de sangre no está permitido…
En el pasado no había problema, pero en estos años recientes, la sangre fue prohibida por el código de distribución de la televisión. Naotoshi Shida, un animador y productor de Toei fue preguntado recientemente sobre la falta de sangre en Dragon Ball Super y respondió diciendo:
“La censura es algo bueno, cuando usted tiene en mente la audiencia principal de la obra”, dijo el productor, quien hace enfásis en que todo se hace para proteger a los menores.
Sin embargo, todavía causa varios problemas para los fans. En Dragon Ball Z, había escenas como la muerte de Vegeta en Namekusei, que fue un momento muy marcado. Ahora imagina aquella escena sin sangre, el efecto no sería el mismo. Hoy, vemos a Goku casi muerto, pero no hay una gota de sangre cerca de él, es algo raro ver.
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