Las armas ninjas de Naruto forman una de las partes más importantes del mundo creado por Kishimoto. A pesar de casi nunca ser efectivos, vemos shurikens, kunais y pergaminos ser usados en prácticamente toda lucha de la obra.
Sin embargo, hay un arma ninja que puede ser aún menos eficaz que todas las demás. Estamos hablando del sello explosivo, un arma que aun siendo muy poderosa en la teoría, nunca tuvo ningún efecto a gran escala…
El sello explosivo funciona de una manera bastante simple, explotando en el momento que el usuario desee después de ser pegado en un lugar determinado. Sin embargo, en todo Naruto y Naruto Shippuden, el sello explosivo fue efectivo en una sola situación.
Durante la Cuarta Gran Guerra Ninja, Madara acaba poniendo un sello explosivo en uno de los ninjas que está luchando contra, y la explosión es suficiente para derrotarlo. Ningún otro personaje llegó a sufrir cualquier tipo considerable de daño debido a un sello explosivo.
El único otro caso efectivo del sello explosivo también fue durante la Cuarta Gran Guerra Ninja, cuando Tobirama usó su cuerpo inmortal para crear y activar sellos explosivos indefinidamente. El arma sólo se hizo viable porque fue usada en una cantidad absurda, mucho más allá de lo normal.